Ainhoa ganadora moral


Por fin ha terminado este remix de top manta con los grandes hits de GH. Con lo fácil que había sido meter a una pareja de cada edición desde el principio y haber organizado un reencuentro editable en DVD, la han cagado hasta el punto de que una persona que no ha permanecido en la casa ni una cuarta parte del concurso ha quedado finalista.

La gala final no trajo sorpresas, desde que hace mes y medio Pepe entrara por la casa todos sabíamos que si nadie ponía remedio, iba a ser el ganador. Era fácil competir saliendo con tanta ventaja, aunque también hay que reconocerle cierto mérito y el hecho de que no dejara a Ainhoa en las puertas de la final como en GH 5 es algo de agradecer.

A pesar de todo, hay una pareja que se ha convertido en auténtica protagonista, que aunque no han podido jugar peor han quedado terceros y han sido los concursantes que más han aguantado dentro de la casa. Por derecho propio, querido Orlando, que menos mal que en tu edición estuviste callado porque cada vez que abres la boca demuestras lo niñato mal criado que llegas a ser, debe ser que tanta propina en los coches de choque te han hecho pensar que vales para algo más que para demostrar que profiden tiene un buen cliente.

Podridos por dentro estaban los concursantes de GH 10 que vieron como a pesar de ser mayoría y meter mierda a espuertas, se quedaron a un paso de la final. La patética actuación de Gema que se ha olvidado de que hace menos de un mes reconocía tener una personalidad muy cercana a quien ahora cataloga como barriobajera y la tristísima intervención de la mediometro dejaron a esa edición más abajo de lo que ya estaba de por sí. La milá no entendía porqué la chiquitaja se sentaba como si fuera una diva jolibudiense, y la respuesta es sencilla, si se sienta de otra forma, le cuelgan las piernas y le sale barriga, algo que unido a su limitada verborrea le hacen parecer menos espabilada de lo que realmente es. Como ejemplo, llegó a recochinearle a Ainhoa el puesto en el que ha quedado en el concurso... ¿alguien me refresca en qué lugar quedó ella?. La porquería también se guarda en frascos pequeños, porque si fueran más grandes el hedor impediría acercarse a menos de 50 metros.

Con todo y con eso Ainhoa estuvo fuerte, demostrando una templanza frente a los insultos que bien la habrían valido la victoria si la hubiese puesto en práctica en la casa. Pero prefiero una Ainhoa real, sincera y visceral a una comedida y prudente fingiendo por el premio.

Imagino que esta noche en el debate veremos más de lo mismo, donde falten las ideas pero sobren argumentos contra la auténtica ganadora moral del concurso. ¿Asistirán Dani R y Arturo? ¿Reconocerá Pepe ser un proxeneta? ¿Veremos cómo le cuelgan las patitas a Chiqui? ¿Le habrán estirpado el tumor cerebral a Nicky? ¿Se acabará esto ya de una vez?

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3 Response to "Ainhoa ganadora moral"

  1. Coda says:
    5 de abril de 2010, 12:46

    me encanta la objetividad del apa... la cual comparto totalmente. ainhoa siempre será ganadora moral, hay que joerse...

  2. Coda says:
    8 de abril de 2010, 13:20

    ahora solo nos queda saber si pepe y ainhoa se harán novietes o si tendrán una relación laboral sin mas.. vamos, que si la va a ofrecer regentar su casa de pilinguis con él...

  3. Anónimo Says:
    5 de mayo de 2010, 7:46

    Sí, sí, objetividad total, jajaja. También la comparto, todo sea dicho. Por mucho que no haya entendido el juego kamikaze de Ainhoa, de los que había prefería que hubiese ganado ella, incluso por encima de Silvia. Y no sólo porque Silvia haya estado sólo dos semanas (según ella sabía que iba para dos semanas porque a ella le encanta su vida fuera y no podía perder más tiempo), sino por ese rollo de superioridad que lleva respecto a sus compañeros. Rollo que puede estar muy bien si lo sigues desde tu casita en Málaga, pero con el que no puedes seguir desde el momento en que te prestas al reencuentro por pelas y como suplente de la Galera. Va a tener razón Ainhoa en llamarla "suavona". Juas. En fin, es que me decepcionó en el debate.

    Por lo demás, una vez termindado se agradece que no haya que volver a ver Nacho Montes, Carmen Alcayde o el supermodelo Iván Madrazo, de quien desconozco cómo fue como concursante, pero que como tertuliano era un dolor. O los desvaríos de Milá, que aunque divertidos a veces (ese babear por el Duque, juas) dan cierta penilla en el fondo.